jueves, 21 de mayo de 2009

canguros huérfanos

yo tenía un conejito que olía a'pio y se llamaba pantalones...
un día nada más dejó un rastro de pelotitas café rumbo a la puerta y nunca más lo volví a ver.

3 comentarios:

David dijo...

hijos pródigos
:)

mont dijo...

si vuelve al rato, sino desaparecido

Chabe o Chave dijo...

Pantalones, no le alcanzó el apio para enrumbarnos a su encuentro...pero pensá ahora podés cantar:

Ay mi conejito era tan bandidón a la media noche se fue sin calzón ay caramba, ay carambaaaaa aaa

Eso a mí me reconforta, y así no me arrulla el llanto sino el dulce sonido del tecno (esto es tecno para todas las discotecas chun chun chun) y la siempre constante pregunta de cuantos dientes tendrá ese tipo con tamaño bocota que se trae!

(además recordá las cartas que nos envió!, el tenía que cumplir su misión...algo relacionado con alemania occidental y cierta desaparecida unión soviética...luego de encontrar mundana la vida de las vegas)